¡Cocinemos juntos!
Muchas veces nos desvivimos por inventar panoramas fuera de la casa y, por momentos las ideas parecen agotarse, y sin darnos cuenta, tenemos opciones a la mano que se pueden transformar en una oportunidad única y entretenida para compartir con los que más queremos.
La cocina suele ser un lugar de encuentro, lleno de potencial, en el cual todos pueden explorar sus capacidades y talentos. Hacer preparaciones con los más chicos de la casa es una actividad altamente motivadora, una experiencia en la que podemos compartir, jugar, aprender y disfrutar como familia.
¡Para ponerle un alto a nuestra rutina y entregarles a nuestros niñ@s un tiempo de mayor calidad queremos proponerte una actividad en la que podrán involucrarse todos los integrantes de tu familia, cocinar! Una actividad que en el día a día puede ser un tanto agobiante y tediosa, pero que se puede transformar en todo un panorama si todos participamos de ella.
Preparar una receta potencia el trabajo en equipo, ya que la idea es que cada uno haga su aporte; ya sea en la compra, racionando la cantidad de cada ingrediente, revolviendo, amasando, disponiendo el montaje y la decoración o arreglando la mesa para luego disfrutar todos juntos de la preparación.
Los beneficios de cocinar juntos en familia son tantos, que queremos compartir contigo algunos de ellos, para que así te motives, invites a tus niñ@s y pongan manos a la obra:
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Ayuda a mejorar la motricidad fina
Cortar, mezclar, amasar, manipular utensilios y cosas pequeñas hacen que los niños desarrollen de mejor manera sus habilidades motoras y de coordinación.
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Aprenden a desarrollar pensamiento lógico y matemática
Enfrentar conceptos como medidas enteras o fraccionadas (200 gramos de harina o ¾ de taza de agua), cantidades (4 huevos) o seguir con cierta coherencia el paso a paso favorecen estas habilidades.
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Aprender a comer más sano
El hacer preparaciones caseras, favorece que tus niños coman mejor, ya que tú controlas qué tipo de ingredientes utilizarán, por ejemplo, puedes explicarles que si quieren prescindir del azúcar pueden endulzar con dátiles o miel. Asimismo, te permitirá conversar sobre cómo poder comer de manera saludable y hablarles sobre diferentes tipos de alimentos.
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Ampliar sus gustos
Entre más cosas prueben los niños, mejor disposición tienen a probar nuevos sabores, lo que aumenta las posibilidades de hacer una dieta más completa, equilibrada y saludable.
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Acercarse a la ciencia
Dentro de la cocina son muchos los fenómenos que podemos observar; cambios de texturas, estado (de líquido a sólido), formas, etc. Un pequeño laboratorio que nos permitirá explicarles el cómo y por qué de estos procesos.
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Estimula la creatividad
Cocinar es una actividad que nos permite reemplazar algunos ingredientes por otros, muchas veces podemos hacer la misma receta de diferentes maneras, y en esa tarea es muy entretenido desafiar a los niños para que la modifiquen. Por su parte, durante el montaje y decoración, la imaginación y la estética serán variables valiosas en el resultado final.
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Mejorar habilidades sociales
Cocinar es una dinámica de trabajo en equipo, fortalece los lazos dentro de los integrantes de la familia, y desafiará a los cocineros a decidir entre todos cuál será la preparación y qué rol desempeñará cada uno al momento de hacer la receta.
Anímate a planificar una receta con tus niñ@s y a disfrutar de una experiencia enriquecedora, de la que todos disfrutarán y aprenderán…así que, ¡a ponerse el delantal, arremangarse las mangas y manos a la obra!
